Jefa de laboratorio de Investigación y docencia del VRI. Magíster Scientiae en Tecnología de alimentos. Estudios concluidos de doctorado en Nutrición y Alimentos (USIL). Ingeniera en Industrias Alimentarias.
Cuando empecé mis estudios de doctorado, estaba gestando, así que dije: “Seguiré hasta donde me dé el cuerpo y las ganas”. Hubo una pausa a fin de año que coincidió con la fecha en que di a luz. Continué con mis clases, pero en esta continuación yo ya estaba con la bebé, dando de lactar y preparando mi material y mi exposición. En ese momento dije: “Esto no lo pasan los hombres”. Necesitaba un tiempo adicional para poder atender a mi bebé y continuar con mis clases. Quería lograr mi objetivo, no podía dejar de estudiar. Eso me dio fuerzas para continuar y no sentirme en desventaja.
A las jóvenes que quieran estudiar alguna carrera de Ingeniería, que han investigado de qué trata la carrera y les gusta, les recomiendo que no pongan una barrera creyendo que son carreras para hombres, porque no hay carreras solo para hombres. Sigan adelante, con todo, porque, así como tenemos que superar desafíos, también tenemos algunas ventajas. Por ejemplo, en el tema de postulación de proyectos consideran puntaje cuando se trata de mujeres, y esto es para motivarnos a seguir investigando y generando conocimiento valioso.